Apartamento ubicado en los alrededores de Plaza Francesc Macià.

La nueva configuración de la vivienda se redefine a partir del uso de geometrías primarias y de la interacción entre volúmenes que van demarcando las estancias, articulando los recorridos y que estructuran el vacío y la ocupación.

La materialidad monocromática casi total de la vivienda nos permite centrarnos en los aspectos más fundamentales, que prime por encima de todo la experiencia en el espacio, y posibilita que la luz y las sombras dibujen y doten de discontinuidad a la cohesión generada por esta uniformidad.